TEJIENDO HISTORIAS...

Cuando la madeja se lía no queda otra que desliarla, cuando la madeja de ese hilo se deshilacha hay que pulirla, darle forma e intentar recuperarla... 

El sentido por el que se desbocó es incierto, a veces pasa, a veces hay que pasar por el caos para encontrar la solución y paso a paso volver al camino correcto... Lo que está claro es que la madeja nunca deja de crecer y, como consecuencia inevitable, de tejer tus historias...

Historias... momentos que agarro con fuerza es lo que hoy me ha presentado este lunes por la mañana. Hoy venía a la pelu una cliente a hacer uso del autolavado, ya ha venido más veces a la pelu, un par de veces. Me acuerdo cuando apareció la primera vez con su nieto en el carro, la observé, a simple vista vi a una abuela luchadora, de las que han sacado a sus hijos adelante y ahora se encargan de sus nietos.

Hoy volvía por el rincon petzuñero a lavar a su perrito. Tan alborotador como siempre Casper hacía de las suyas dentro de la bañera mientras su compañera humana y yo charlabamos de todo un poco... Conversaciones que dicen mucho, que expresan más, conversaciones en un habitáculo de 5x5 entre dos personas que apenas se conocen... 

Este tipo de situaciones son las que me hacen creer en las personas, en los momentos mágicos que sin querer se presentan y oye, ahí están, a mi me encantan... miro a los ojos, disfruto del momento y !joder me siento bien¡. 

Después de un rato de contarnos, sorpresa, Pilar abre su bolso y me dice "Ay María que te había traído un regalo", la miro y veo que saca un paquetito con un collar, no un collar cualquiera, un collar hecho por ella, tejido a ganchillo, con adornos super chulos... 

Yo que ultimamente ando algo ñoña y que estas cosas me emocionan profundamente se me han saltado las lágrimas, no he podido por menos que acercarme y pedirle un abrazo, no solo dárselo ojo, le pedido un abrazo para poder devolverlo que es distinto, abrazo que hoy me ha reconfortado tantísimo... 

En el fondo no sabemos lo que podemos aportar a la persona que tenemos en frente, sea con una conversación, escuchando lo que tiene que decir, que contar, dando un gracias sincero o un abrazo reconfortante, cada cual tenemos nuestra lucha interior y no sabemos que cruz tiene dentro la persona de al lado... Solo se que hoy Pilar ha tejido no solo su collar, sino un pedacito de historia en mi persona y en mi negocio, momentazos para recordar... hoy Pilar esta entrada es para ti. ¡Mil gracias!